Las nuevas tecnologías hacen que nuestra vida sea mucho más fácil en múltiples ámbitos diferentes, y el aprendizaje de idiomas no es una excepción. Aunque siempre hay quien prefiere acudir a una academia tradicional y aprender un nuevo idioma siguiendo las pautas de un libro de texto, cada vez más gente opta por soluciones digitales que permiten un aprendizaje más dinámico y adecuado a nuestras necesidades.
Una de las herramientas más recientes que se puede utilizar para aprender idiomas es la inteligencia artificial, que está siendo especialmente popular durante las últimas semanas gracias a la aparición de ChatGPT. Esta nueva aplicación va mucho más allá de los chatbots tradicionales, ya que tienen una capacidad dialógica sin precedentes que le ha permitido superar con creces el test de Turing.
Un compañero de conversación en cualquier idioma
Debido a que se trata de una herramienta gratuita, a su excelente dominio de la gramática de múltiples idiomas y a su capacidad para responder de forma precisa a lo que se le pregunta, miles de personas están mejorando sus conocimientos de otros idiomas utilizando a ChatGPT como compañero de conversación.
Como las conversaciones mantenidas con ChatGPT son personalizadas, los usuarios pueden elegir los temas que necesitan dominar en primera instancia. Una persona que quiera perfeccionar el inglés para los negocios, por ejemplo, puede mantener conversaciones sobre inversiones bursátiles o inmobiliarias cada día con esta IA. Además, siempre que aparezca un término que no se comprenda del todo, es posible preguntarle a la IA por su significado o por las características de su uso en el idioma objetivo.
Las consultas pueden alternarse en el idioma objetivo y en español
No se trata simplemente de una conversación que simula la charla con una persona nativa. ChatGPT domina a la perfección múltiples idiomas, y puede alternar entre unos y otros en una misma conversación. De esta forma, se le puede pedir que nos explique en español cualquier duda que tengamos en el idioma que estemos intentando aprender, lo que nos permite acelerar el proceso de aprendizaje.
Además, ChatGPT también puede utilizarse como un profesor personal. Se le puede pedir, por ejemplo, que nos enseñe frases básicas en el idioma que nos interesa, como la manera de pedir direcciones en una ciudad, o la forma de leer el menú de un restaurante. Y también nos puede enseñar consejos esenciales con respecto a los usos y costumbres de los países donde se hablan estos idiomas para facilitar nuestro proceso de adaptación.
Una app que se suma a muchas otras
El desembarco de ChatGPT se suma a una amplia selección de aplicaciones que ya estaban disponibles para el aprendizaje de idiomas. Algunas de ellas, como Duolingo, han sido diseñadas específicamente para este aprendizaje, y ofrecen servicios gratuitos o de suscripción para acceder a sus herramientas de enseñanza lingüística dinámica. Otras, en cambio, son aplicaciones con otros propósitos que también pueden emplearse para aprender un idioma.
Debido a que en muchos casos es necesario almacenar nuestros datos de pago en estas apps, resulta imprescindible proteger de forma adecuada nuestras cuentas para prevenir los hackeos de las tarjetas de crédito. Un gestor de contraseñas guarda los datos de forma segura gracias al empleo de contraseñas robustas y únicas para cada cuenta, a su sistema de protección anti-phishing, y a sus sistemas de alerta en caso de que se produzca una filtración.
Las aplicaciones de citas, otra opción interesante
Otro de los recursos que se utiliza cada vez más para el aprendizaje de idiomas son las aplicaciones de citas. Tinder, Happn, Meetic y Badoo permiten conocer a personas interesantes en nuestro entorno para chatear con ellas, y, en algunos casos, habilitan el cambio de ubicación artificial para conocer a personas de otros lugares del mundo.
De esta manera es posible practicar la conversación y consultar toda una serie de dudas lingüísticas y culturales sobre el idioma que nos interesa aprender. Se trata de una forma más cálida de practicar otro idioma, ya que pasarnos el día charlando con una inteligencia artificial puede resultar un tanto frío y desolador. Además, se han dado múltiples casos de personas que terminaron conociendo a su media naranja gracias a estas apps.
Con independencia de las preferencias de cada quien, entonces, lo que parece claro es que el ámbito digital ofrece una variedad de aplicaciones cada vez mayor para iniciarse en el aprendizaje de un idioma o perfeccionarlo más fácilmente. Basta con elegir las apps que nos resultan más adecuadas, establecer un plan de aprendizaje y ponerse en marcha.