Seguramente te has encontrado más de una vez con la frase “aún tengo tiempo, puedo hacerlo después”. Hoy te contamos cómo evitar procrastinar en tus rutinas diarias.
Procrastinar es un mal hábito que puede tener un gran impacto en tu trabajo. Por otro lado, se ha descubierto que la procrastinación puede provocar estrés, ansiedad y baja autoestima. Sin embargo, no es fácil dejar de procrastinar, pero es posible hacerlo. Hay muchas maneras de lograrlo, solo necesitas encontrar la que mejor se adapte a tus necesidades. A continuación, te daremos 5 consejos que te ayudarán a dejar esta mala costumbre.
1.Determina los objetivos del trabajo
Una de las causas de la procrastinación es la falta de claridad en el propósito de las acciones. Si sueles procrastinar mucho en tu trabajo o estudios, conecta el objetivo de trabajar o estudiar en tu vida. Es más sencillo dejar de procrastinar cuando sabemos por qué y para qué hacemos las cosas.
Pondera las prioridades
Es probable que al momento de realizar los pendientes del trabajo o estudios, pienses por dónde empezar. La mejor manera para salir de este bucle es ponderando las prioridades. Si bien todos los pendientes pueden ser igual de importantes, no todos se tienen que entregar o terminar en el mismo segundo.
3. Dividir las tareas grandes en otras más pequeñas
Puede ser difícil saber cómo empezar y cuándo terminarás algún proyecto. Es por eso que puede ser tentador posponer una tarea importante. Sin embargo, dividir una meta final en pequeños retos puede ser la mejor manera de cumplir con objetivos. De esta manera también será más sencillo poder hacer seguimiento del avance.
Establece fechas propias de avance
Una manera rápida de poder combatir con nuestra mente procrastinadora, es establecer fechas de entrega propias. Podemos pactar la entrega total o parcial de nuestro proyecto unas 2 o 3 fechas antes de la entrega oficial. De esta manera, finalizamos el proyecto con anticipación, ya que para nosotros la fecha de entrega final es días previos a la verdadera.
5.Emplea estrategias para gestionar el tiempo
Probablemente cuando sepas con claridad lo que hay que hacer, te sientas más motivado. Aunque igual puede haber días en los que necesites apoyo extra para concentrarte. Por ello, puedes usar estrategias de gestión de tiempo, para dejar de hacer varias tareas a la vez y entrar en estado de fluidez.
- La regla de los dos minutos. Si necesitas menos de 2 minutos para finalizar una tarea, hazla ahora. Esta metodología se centra en las tareas pequeñas, con la idea de que si la terminas antes, tendrás más tiempo y más claridad mental para poder centrarte en el trabajo más fuerte y terminarlo.
- El timeboxing. Está orientada a los objetivos, puede ayudarte a aumentar la productividad y a evitar la procrastinación. Cuando fijas un “bloque de tiempo” o timebox, estableces una meta para finalizar una tarea específica dentro de un período determinado.
- La técnica “Pomodoro”. Esta técnica se basa en alternar sesiones de trabajo y de descanso. Una ‘pomodoro’ es una sesión de trabajo que puede durar 25 minutos, y después de ello, se toma un descanso de 5 minutos. Al trabajar en secuencias breves, es más probable que uno logre mayor productividad y mantenga la motivación.
Estos fueron algunos consejos básicos que se pueden poner en práctica fácilmente en casa o en el trabajo para evitar la procrastinación.